miércoles, 9 de enero de 2013

LA NOCHE PROMETÍA.- Sexysara, Asturiano42, Utópica

La noche prometía, Sexysara, Asturiano42 y yo, la compañía ya hacía que la noche mereciera la pena.
La primera conversación que recuerdo era de arte. No de arte en general, si no del arte que teníamos cada uno. 
Recuerdo haber hablado que lo que me hacía atreverme a mostrar mis escritos no era mi capacidad, si no que, al reconocer que no soy escritora, a una de la quitan los complejos.
Sexy empezó a hablar del atrevimiento de pintar, comparándolo, y yo la conteste que no era mi caso, eso sería un sacrilegio, igual que el cantar, si venía de mi.
- Entonces tenemos que hacernos un karaoke tú y yo.
- Noooo, en eso no me pilláis, yo te bailo lo que haga falta pero nada más, que me gusta conocer por lo menos el terreno en el que juego, y en ese, no sé ni jugar.
- Bueno yo imaginaba más un karaoke tipo Bridget Jones, con una botella de alcohol, en el suelo de una habitación, a grito pelao jajajaja.
- Vale pero las dos solas ehhhhh, no quiero testigos de eso.
- La música la pongo yo- dijo Astur, que como buen zorro observaba más que hablaba.
- Hecho- contesto Sara divertida
- Y si necesitáis unos cacahuetes os bajo al chino si es necesario. 
Las risas empezaban a sucederse y el alcohol, aunque moderado, comenzaba a relajar los sentidos.
- Había dicho que sin testigos.
- Yo me tapo los ojos, o mejor dicho, los oídos.
- Astur, no me des ideas.
- Te las doy, te las doy
Tras unas risas, voy camino de la cocina, a por más hielo y cuando vuelvo, les veo muy juntos, probablemente haciéndose una confidencia.
- Chicosssssssssssss.
- ¿Que?- contestan casi asustados con mi grito.
- Pensé que os habíais liado entre vosotros ¡joder!, que susto.
- ¡Qué va!, Sexy es demasiado sexy para mí.
- Me parecía raro pero....- de repente soy consciente del comentario de Astur- venga Astur.
- Eres un pelotari jajajaj- le dijo Sexy.
- No te subestimes.
- Tengo que probar todas las opciones, hasta que Sexy me dé un mamporro.
- Pues como sigas así no va a tardar mucho.
- Cacahuetes, música, alcohol, ¿qué más añadiríais?
- Sexo, - conteste divertida- ehhhhh, no, que estamos solas, y yo no soy bi, lo retiro.
- Que pena Uto.
- Solo un poco Sexy pero si no tengo un tío en medio.....
- Sexy mucho eso seguro- dijo Sexy usando su nombre para hacerme una broma.
- Tú te puedes apoyar en ella mientras ella se apoya en mí y por la propiedad transitiva.
- Al final te has colado en nuestra fiesta, Astur.
- Yo me apoyo en Sexy,  jaja.
- Espero que no me hayas escuchado cantar.
- Que yo soy de sonrojo fácil- interrumpe Sexy
- Más me sonrojo yo debajo Sexy, me estáis dando un calor....
No sé si fueron mis palabras las que nos hicieron darnos cuenta de que realmente estábamos empezando a sentir calor, pero de repente se hizo un silencio que se vio interrumpido por una reflexión de Sexy.
- Yo siento cosas distintas, con chicas no tengo gran experiencia.
- ¿Que sientes sexy?
- Pues cuando me excito con un hombre siento la excitación concentrada en la vagina y alrededores jejejeje.
- ¿Y con una mujer?
- Cuando me excito con una mujer siento el calor en la garganta, en el pecho que me oprime, es un deseo distinto.
- Así me gusta, todo al centro de masas.
- Imagino porque la parte masculina la domino, y la femenina no, pero mezclarlo todo debe ser volverse loca.
- Pues déjate dominar por la parte femenina- digo sin pensarlo  mucho pero acercándome peligrosamente a sus labios.
Antes de darnos cuenta, la secuencia de fantasías que hemos comentado se suceden ante nuestros piso casi sin ser contiendes de ellas.
Pero el caso es que Sexy esta sobre mi y Astur a su espalda.
Siento las embestidas de Astur sobre Sexy y su pecho roza el mío con el movimiento.
- Ese rozamiento no puede pasarte desapercibido ahí abajo.
- Al contrario.
Quité la mano de Astur de la cadera de Sexy para llevarla a mi sexo.
- Mira, estoy empapada.
Ni siquiera necesitas abrir los labios para notarlo, han dejado su posición natural, para dejar un hueco tenue, por el cual Astur se adentró sin excesivas complicaciones.
Ver el rostro de Sexy hace que me ponga más cachonda.

Su cara está desencajada, sus ojos se ponen en blanco de cuando en cuando, y cada vez se acerca de manera más peligrosa a mí, mirándome con cara de deseo.
Una sonrisa le sirve de señal a Astur para follarla más fuerte.
Se crece dentro de ella cuando siente el ardor y el deseo que emana.
Sexy se tira a mi boca, no para besarme, si no para comerme apasionada, entregada ya completamente a su deseo y a su parte mas bi.
Me elevo poco a poco en la cama para dejar mis pezones a la altura de sus labios, pronto están húmedos y duros y no puedo evitar elevar mis caderas buscando un contacto de mi sexo con Sexy.
Astur no deja de observarnos, denotando la ansiedad de ambas por tocarnos, y eso le pasa factura y lo canaliza en una mayor transmisión de energía.
- Que alguien me coloque las gafas.
Dice Sexy, quizás nerviosa.
El esfuerzo en la celeridad del movimiento permite que las gafas nunca queden en su posición original y eso enorgullece y enloquece más a Astur.
Sexy vuelve a subir hacia mi boca y, de nuevo me besa con pasión a lo que Astur responde con fuertes embestidas y, colando sus dedos bajo el cuerpo de Sexy y sin previo aviso, me penetra con ellos.
Sexy aprisiona mis manos sobre mi cabeza, inmovilizándome bajo su cuerpo para bajar despacio por mi costado.
El placer que transmitimos es volátil y llega a Astur que se une a nuestro beso. Apasionado, entra con su lengua allí donde todo se empieza q cocer mientras acaricia mis brazos. Un beso a tres mmmm, un tetraedro de fuego atraviesa nuestras lenguas. Las caricias no han cesado.
- ¡¡¡¡¡Que alguien me pare!!!!-grita Sexy
- Noooooo. -Contesto...
- ¡Que me frenen!
A hurtadillas Astur le come el culete a Sexy.

A estas alturas, aquello se empezaba a convertir en una locura difícil de describir, a si que, pasemos a modo diálogo.
Sexy: ¡necesito apartar mis manos de vosotros!
Utópica: húndelas.
Sexy: mantenerlas lejos.
Astur: no me da la gana, no pienso hacer semejante cosa.
Mientras nosotras seguimos con nuestra retórica, Astur no para de tocarnos.
Utópica: ¿Que quieres sexy?, queremos que tomes la iniciativa, vamos a parar y serás tú la que siga.
Astur: me obstinaré para que recibas una lanza de deseo por las dos partes.
Sexy: si te sigo tocando voy a correrme, soy así de facilona.
Utópica: mmmmm.
Sexy: prefiero sufrir un poco más.
Utópica: Astur, sigue que voy a poner mi boca bajo el sexo de Sexy, quiero beberla.
Astur: hazla que rezuma como un manantial. 
Sexy: sería perfecto tener mis manos quietas detrás de mí.
Astur: no puedes sexy.
Sexy: retorciéndose en deseo de poder tocarte el pelo morena.
Utópica: ya no hay marcha atrás.
Astur chupa un pezón de sexy al tiempo que juega con los dedos de su otra mano con el otro.
Sexy: ¿es que nadie va a atármelas?
Utópica: no sexy.
Me acerco a su oído, susurrando: tócame me muero de deseo.
- Mmmm  que bien hueles.
No resiste ese susurro, Sexy empieza a descontrolarse y Astur la posee  con más firmeza.
Utópica: no pienso atarte ahora, otro día te ato, pero hoy no, hoy quiero sentir tu descontrol- Digo sin apartarme de su oreja, respirando fuerte.
Sexy: tu pelo.
Astur: que el deseo le llegue por todos lados, por la garganta como decías antes, por tu vagina inflamada.
Utópica: por ambos lados astur
Astur: tu cuello.
Utópica: el tuyo y el mío, volviéndola loca de placer
Sexy: aaaaaah...mmm por fin -dice cuando consigue llegar con sus manos a mi pecho, mientras, mis manos van a su culo y lo abren para que Astur entre mejor. Le miro con cara pícara.
Sexy recorre la línea que hay desde mi nuca hasta el final de mi espalda mientras Astur la folla como loco, como poseído por el diablo, poniendo toda su alma en el esfuerzo, le beso hundiendo la cabeza de Sexy en mi cuello.
Sexy busca a Astur, moviendo su culito y nuestros coñitos se juntan con el movimiento. Busca sus besos, moviendo la cabeza cual niña del exorcista, pero, ya se sabe, solo la excitación hace que se consigan cosas que, de otra manera, serían imposibles. Hecha su mano hacia atrás, para agradecerle tanto placer. Astur responde agarrando su cabeza para adentrarse más profundamente en ella, empujando y obligándola, disfrutando del esfuerzo que hace Sexy por cubrirle enterito.
- Uto, ayúdala
- No necesita ayuda, está tan cachonda que puede con los dos, parece un pulpo.  Es ella la que no nos da respiro Astur, ha perdido la timidez, su fuerza se ha multiplicado, como la de Hulk, esta mujer es increíble¡¡¡¡¡¡¡
- Cuando le venga de golpe el orgasmo, que se muerda los labios y consiga ese tiempo de retardo, para que vuelva a generar un orgasmo amplificado.
- Me destrozará la boca Astur, que me está besando.
- Bésala sin estupor.
- Estoy deseando sentir su orgasmo en mi boca.
Hablamos como si Sexy no estuviera, sabiendo que nuestros comentarios la están poniendo más cachonda y que la situación que está viviendo la vuelve incapaz de comentar.
- Me encantará sentir sus dientes mordiéndome Sexy, quiero que te corras.
- Si tuviese palabras, hablaría- dice entre jadeos.
- Di las obscenidades que le vengan a la mente -interviene Astur- quiero que lo acompañes con tus palabras.
- Necesito tu orgasmo, preciosa.
- Pero solo siento calor, llegan a mi sonidos, y colores, negro, rojo, rojo, blanco….
- Y fuego Sexy, el fuego de mi mirada.
Bajas la mirada, como avergonzada, pero te da igual, levanto tu cabeza y te miro a los ojos.
- Dime Sexy, dime como te sientes.
Siente mi mirada clavada en ella, aunque cierre de cuando en cuando los ojos.
- Puf, estoy a punto.
Muerde su labio, muerde el mío.
- Córrete zorrita, quiero que empapes mi sexo de cómo se pone el tuyo, quiero sentirlo gotear sobre el mío.
- Siente el amasijo de manos que tocan- consigue decir Astur.
Los jadeos de sexy se multiplican, y me mantiene la mirada, retadora, me come la boca, hasta hacerme daño, Astur sigue embistiendo como si la vida le fuera en ello.
- Que confluya ahora todo a la vez, córrete como una perra.
- Dios- elevo mis caderas para unir nuestros sexos, para sentir tu humedad en el mío, para sentir las embestidas de Astur.
Sexy no puede evitar dejarse llevar, gime de una manera muy característica. Vuelvo a su oído.
- Me gusta sentirte caliente como una perra, estas empapada.
Astur piensa que necesita correrse, elevar su polla sobre nosotras y dejar su miel sobre nuestras cabezas.
- Mucho, mmmm
- No te avergüences, expresa con tu cuerpo todo lo que sientes –vuelve a intervenir Astur.
Jadea, respira, baila bajo la polla de Astur, me besa, me muerde, lleva su mano al culo de Astur, apretándolo contra ella, sigue gritando, me mira a los ojos, se apoya en mis hombros, vuelve a gritar, su cuerpo se relaja sobre el mío, muerde mis labios de nuevo.
- Me ha encantado que te corrieras encima de mi –Agarro su mano, la pongo sobre mi sexo y la guio para que me acaricie.
- Que caliente nena, que suave eres.
- Vuelvo a subir tu mano, empapada y la lamo, mirándola lasciva.
- Me encanta el sabor de nuestros sexos juntos, pero tenemos a un caballero que no ha terminado, acabemos con él.

Sonrío a Sexy.
- ¿En qué piensas?
Nos volteamos, mirándole con cara de malas, y, andando a cuatro patas sobre la cama cual gatitas hambrientas nos dirigimos a el contoneándonos coquetas y empezamos a acariciarle. Sin darle tiempo a pensar agarro su sexo, y lo meto dentro de la boca susurrándola al oído.
- Empieza tu, así saborearás tu propio sexo.
Mientras, yo le acaricio los testículos y saco mi lengua mirándole mientras recorro su muslo, acercándome peligrosamente a su sexo, y a la lengua de Sexy, mmm, estoy deseando sentirla de nuevo y lo hago sobre el cuerpo de Astur, que empieza a jadear. Ufff, verle así con la cabeza volteada hacia atrás, imaginando sus ojos en blanco, me pone a mil, y agarro la cabeza de Sexy y la hundo en su sexo mientras yo no dejo de acariciar y meter la lengua entre ellos. Un placer inusitado recorre el cuerpo de Astur.
- Fóllame sexy.
- ¿Con mi boca o puedo subirme al caballo?
- Sexy no preguntes ¿que deseas?
- Fóllame como una potra salvaje, me da igual con tu boca que con tu coño ardiendo.
Antes de que Astur termine de hablar, Sexy le está cabalgando.
Yo me aparto, a una esquina de la cama observando como Sexy dibuja con sus caderas trazos que no siguen ningún patrón. Me gusta ver como se descontrola, como se entrega a la pasión. De manera autoritaria, cierra las piernas de Astur con sus pies; Astur aplasta sus dedos en su culo, para que el rozamiento se haga más intenso, Sexy le cierra con las rodillas.
- Quieto – grita autoritaria Sexy- ni te muevas - para subir y bajar lento sobre su polla y, en cuclillas, centrarse en el glande.
Me acerco despacio al oído de Astur.
- ¿Estás cachondo eh cabrón?
- Esta perra sabe lo que se hace
- Es que esta zorrita sabe bien cómo moverse, déjate llevar tu también.
Arriba y abajo, deprisa, deja caer su peso sobre sus ingles, yo acaricio el pecho de Astur mientras voy de una mirada a otra. Los testículos de Astur rozan el ano de Sexy, eso la gusta.
- Sigue, no se te ocurra dejar de hacerlo – consigue decir Astur entre jadeos.
Vuelve al movimiento de caderas que ahora si tienen forma. Su baile favorito.
- Mis huevos están llenos por ambas, no puedo más.
- Pero los descargaras sobre Sexy, Astur.
- No puedo dejar de mirarte nena, estas para comerte de nuevo.
- Ni yo  ti, me excita veros, me encanta verte a mil, mirándote mientras te follas a este cabrón.
Sube hasta dejar su vagina a un centímetro del glande, las venas de astur están que estallan, y Sexy se acaricia el clítoris sin dejar de mirarme, deseosa de echar sus manos hacia mí, pero se tumba sobre su pecho y lo mira, entrando poco a poco. Astur nota una presión desde el cuello hasta los huevos. Ver el culito de Sexy así, en pompa sobre Astur, hace que desee haberme llevado el arnés. Me encantaría entrar poco a poco en su culito, mientras acaricio sus tetas por detrás. Sexy sigue a su ritmo, haciendo que Astur entre poco a poco en ella, Astur está empezando a desesperarse, la suplica que baje, Sexy se para, retrocediendo sobre su cuerpo se la mete en la boca otra vez, mirándome directamente a los ojos.
Astur está desesperado, necesita sentir de nuevo a Sexy cabalgar, la agarra de la cabeza y la hace volver a subir sobre su cuerpo, Sexy vuelve a cabalgarle mirándome con cara de niña buena que acaba de perder su piruleta, Astur no aguantará mucho más. Le beso. También quiero sentir su orgasmo en mi boca cuando llegue el momento. Sus manos buscan el ano de Sexy y lo penetran, haciendo que los movimientos sean enloquecedores-
- Dios que perra estoy, te va a destrozar cabrón.
Sexy acaricia los pezones a Astur, cabalgándole a un ritmo desenfrenado mientras busca mi sexo, que lo acerco. Cuanto más entra su dedo mas enloquecedores son sus movimientos y más me busca.
- Arráncamela si es necesario dentro de tu coño ferviente.
Astur no puede ni tocarnos, agarra fuerte tus caderas, parece tener miedo de soltarlas, como si de esa manera Sexy se fuera a escapar.
- Quiero saborear tu coño.- dice Sexy mirándome a los ojos.
- Ahora no toca, haz de Astur se corra y te lo daré todo.
Lo sabe, pero lo tiene en su mente, con su polla, sus dedos… Me retiro un poco y me acaricio mirándola a los ojos, para, si cabe, que se folle a Astur con más fuerza, viendo el caramelito que te espera al terminar.
- Sigue follándole, nena, sigue cabalgándole.
Sexy cambia de ritmo y la excitación la resulta casi insoportable.
Utópica: Nena reviéntale.
Astur: Cabrona hazlo.
Sexy nota fuego en las rodillas del roce, pero no puede parar, no quiere parar.
Utópica: Córrete cabrón.
Sexy: Llénamelo de leche.
Utópica: Córrete y dame esa pasión a través tu boca.
Sexy: LLÉNAMELO de lecheeeeeeee.
Astur: bufff
El “pobre” Astur no puede ni hablar, y yo vuelvo a su oído: Córrete que me tenéis que comer el coñito entre los dos.
Preso de una locura de lo más excitante, agarra con más fuerza las caderas de Sexy, haciendo que cabalgue hasta el límite de sus fuerzas, para gritar y parar el movimiento, presionando a Sexy sobre su cuerpo. Parece querer atravesarla. Sexy emite un gritito que me demuestra que Astur la ha hecho sentir llena, plena, y se derrumba sobre el cuerpo del más que agotado Astur.
- Así me gusta Astur.
- Me habéis dejado Knock-out.
- Eso es que te has corrido -las piernas te tiemblan.
Sus ojos están en blanco, sus manos se relajan estirados junto a tu cuerpo, su mirada está perdida, pero la gatita parece no tener suficiente. Le descabalga, acaricia la polla, aún dura y así seguirá estando durante mucho rato, el olor de Sexy le mantendrá excitado, su cerebro no entiende de necesidades fisiológicas. Sin darle un respiro, agarra su mano y andando a cuatro patas sobre la cama vienen hacia mí.
- Ahora te toca a ti zorrita, me dice......
Va recorriendo mi cuerpo con los ojos desde los pies camino ambos de mi coñito y se ponen ambos a comerme, peleándose por meter sus dedos dentro de mí.
- Chicos, hay para los dos, dos para cada uno, me tenéis tan cachonda que seguro que no os costará- os digo mientras me recuesto cómodamente sobre la almohada y abandonándome a vosotros.
- No para la gatita- dice Astur mirando a Sexy.
- Miel para los labios- contesta ella, pícara, retirando por unos segundos su boquita de mi coño- seda para los dedos- vuelve a comentar mirándome lasciva.
- Vamos a hacer que esta perra se corra, Sexy.
Como respuesta, agarro a Astur por la cabeza y le llevo a que me coma las tetas, cosa que me pone más perra aún; vuelve a bajar a mi coñito, con su lengua como una espada. Las miradas y los gestos de Sexy, verla tan perra, me excitan tanto o más que los movimientos de Astur con su lengua. Moja los dedos en su coño y viene al mío, roza mi ano, mis labios, besa mi clítoris. Agarro su cabeza y la hundo entre mis piernas.
- Me muero por correrme en vuestras bocas.
- Que se coma sus palabras. Ábrele el coño con tu lengua gatita.
Sexy me junta las rodillas, las dobla hacia arriba y empieza a lamer, no puede alcanzar mi clítoris, pero lo intenta, mantiene firmes sus manos y su lengua.
- Me voy a correr.
 Astur me come el culo, me lo muerde.  Sexy abre por fin mis piernas y entre ambos podéis alcanzar cada rincón y mientras Sexy me come el coño, Astur:
Te reventaré el culo- no sé si eso era una advertencia, porque llega al tiempo que la acción y hace que me muerda la boca casi hasta sangrar.
- Fóllame Astur.
- Aquí estaremos hasta que dejes de jadear y te pongas a gritar sin aspavientos. Sexy mantén la lengua firme, atraviésala que yo hago lo propio con su culo.
- Fóllame Astur, fóllame Sexy- Agarro su cabeza y la hundo aún más en mi sexo, quiero que me bebas mientras hacéis que me corra como una perra.
Sexy intenta conocer cada centímetro, cada milímetro de mi entrepierna sumergiendo su lengua. Agarro más fuerte su cabeza, la tiro del pelo, comienzo a gritar.
Si, si, siiiiiiiiiiiiiiiiiii-  casi la ahogo presionándola contra mi coño, nota en su boca las palpitaciones de mi sexo, la humedad y el calor que desprende.
Astur, al escucharme gritar, se corre dentro de mi culo de nuevo. Cruzamos las miradas y los tres caemos, desfallecidos, sobre la cama.

P.D.:
Este relato me ha costado mucho, precisamente porque ya estaba escrito.
Es el resultado de una de tantas conversaciones del “chat del amor” y he intentado hilar cada una de las frases que los tres protagonistas escribimos. Es, por tanto un relato de autoría compartida entre Asturiano-42, SexySara y  yo misma. Esperamos que os guste.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué locura de relato. Sólo tu puedes conseguir que al leerlo no vea letras y me traslade a un rincón de la habitación mirándoos. Sólo tú eres capaz de hacer que me excite tanto leyendo como los propios protagonistas jugando.

Utópica dijo...

Y solo tu puedes dejar un comentario anónimo y que te reconozca.
Gracias cielo, tu tienes la mayor parte de la culpa, ya lo sabes.